Por si alguna vez soñamos

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Leemos, leemos y leemos. A veces, incluso, descubrimos y solo por esa posibilidad ya merece la pena. Como cualquier género literario, la poesía esconde secretos repletos de significado y emoción. A simple vista, son palabras bellamente entrelazadas, pero bajo la superficie hay todo un submundo esperando ser encontrado. No es (ni más ni menos) que encontrarnos con nosotros mismos y si alguien puede atreverse a este viaje, sin duda, son los jóvenes.

¿Se puede ser joven y buscar los secretos de la poesía en el mundo actual?
¿Podemos, los mediadores, orientarles con brújulas que sabemos no siempre marcan el Norte?

A pesar de su aparente hermetismo, hay poemas que ofrecen un vasto caudal de emociones, pensamientos y significados que son accesibles para todos, independientemente de su edad. Es una travesía, un viaje, un paseo incluso, o una odisea; en todos podremos preguntarnos cómo abordar y desentrañar los secretos de cada verso, revelando así la riqueza de la expresión humana que puede/debe ser usada por los jóvenes. Algo tan importante como entender del mundo a través de las palabras.

En esta ocasión, voy a leerte un precioso (y reconocible) trozo de la obra por excelencia de Calderón de la Barca, La vida es sueño. Esta obra fue publicada en el siglo XVII, concretamente en el año 1636, pero es de brutal actualidad. ¿Tienes las ganas preparadas? ¡Adelante!

Es verdad, pues: reprimamos
esta fiera condición,
esta furia, esta ambición,
por si alguna vez soñamos.
Y sí haremos, pues estamos
en mundo tan singular,
que el vivir sólo es soñar;
y la experiencia me enseña,
que el hombre que vive, sueña
lo que es, hasta despertar.

Sueña el rey que es rey, y vive
con este engaño mandando,
disponiendo y gobernando;
y este aplauso, que recibe
prestado, en el viento escribe
y en cenizas le convierte
la muerte (¡desdicha fuerte!):
¡que hay quien intente reinar
viendo que ha de despertar
en el sueño de la muerte!

Sueña el rico en su riqueza,
que más cuidados le ofrece;
sueña el pobre que padece
su miseria y su pobreza;
sueña el que a medrar empieza,
sueña el que afana y pretende,
sueña el que agravia y ofende,
y en el mundo, en conclusión,
todos sueñan lo que son,
aunque ninguno lo entiende.

Yo sueño que estoy aquí,
destas prisiones cargado;
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.

El poema reflexiona sobre la naturaleza efímera de la vida y cómo todo lo que experimentamos podría ser un sueño. Conexión y percepción entre realidad e ilusión dentro de una sociedad cambiante, virtual y cada vez más dependiente de los filtros, ¿no es esto un tema especialmente bueno para dialogar con los jóvenes? ¿Dónde queda su realidad, dónde queda su mundo palpable? ¿Qué puede ser palpable en nuestro mundo?

No tengo otro objetivo con este artículo que hacerte reflexionar sobre aquello que puede ofrecer la poesía a los más jóvenes. Al final de esta breve «charla» te daré alguna idea para que pongas en práctica esto en tu club de lectura, en la biblioteca, en tu  librería o en tu propia casa. Pero antes: ¿Crees que este poema (pequeña muestra de La vida es sueño) son solo versos rimbombantes al alcance solo de unos cuantos eruditos? Pues te vas a sorprender.

Por resumir y no hacer este artículo infinito, vamos a destacar 4 ideas que rondan sobre la lectura de este poema. Solo voy a darte cuatro pero los caminos a seguir pueden ser infinitos.

  1. Realidad VS Idealismo: ante nuestra lectura, Calderon nos plantea la cuestión del idealismo, donde todo lo que experimentamos en el mundo puede ser entendido como un sueño o una idea en nuestra mente. En otras palabras, sugiere que la realidad que vemos y sentimos no es algo independiente, sino que depende de cómo lo percibimos.
  2. Ser auténticos: la noción de que los personajes viven sus vidas como sueños podría interpretarse de diferentes formas si nos preguntamos: ¿Si estamos en una ilusión/sueño… somos libre realmente? Ser libres es ser fiel a nosotros mismos, no tratar de ser lo que otros quieren que seamos. La autenticidad es un concepto fundamental en el existencialismo porque se refiere a la idea de vivir de manera genuina y coherente con uno mismo, en lugar de ser influenciado por las expectativas de la sociedad o de otras personas. ¿Te suena? ¿No es este un gran punto de partida?
  3. Somos fugaces: el poema también aborda la brevedad, la incertidumbre de la vida. Esto se conecta con la importancia de vivir en el presente y aceptar la naturaleza efímera de todas las cosas.
  4. El YO y MI mundo: cada personaje vive en su propio sueño o percepción de la realidad, lo que plantea la posibilidad de que solo la propia mente sea segura de existir. ¿Solo aquello que yo siento es válido. Solo aquello que yo toco puede ser cierto. Solo aquello que yo veo es el mundo? Pero conocemos de otras realidades que no siempre percibimos. ¿Dónde encajamos al otro en este mundo tan virtual y físicamente enorme?

Son solo cuatro ideas, cuatro reflexiones con las que planificar una actividad interesante con jóvenes a partir de 13 años*. Cualquier propuesta será interesante: un debate entorno a nuestra sociedad a través de la filosofía y la poesía, grupos de lectura que sean un medio de expresión emocional, una actividad de escritura creativa con «El mundo de los sueños» como tema principal, representación teatral de una parte de La vida es sueño, de Calderón de la Barca, diseñar un juego de rol o de scape room con la temática que propone el autor del poema.

Para leer La vida es sueño tienes innumerables ediciones, se trata de un texto clásico e imprescindible de nuestra literatura, así que no te resultará difícil encontrar esta obra de teatro tanto en bibliotecas como librerías. Ahora bien, si lo que vas a buscar son ediciones interesantes para la lectura con jóvenes (en el aula, grupo de lectura o en casa) hay algunas que merece la pena destacar:

-Edición ilustrada por Gabriel Grün, de Libros del Zorro Rojo.
Ed. SM, texto adaptado pro Ricardo Gómez, parte de una colección que reivindica el valor actual de los clásicos.
Ed. Austral, una colección pensada para alumnos de Bachiller.
-Ed. Cáteda, colección Cátedra Base, en la que se profundiza en el diálogo y encuentro filosófico de la obra.

Conversaremos más sobre los versos que puedan enseñarnos a mirar el mundo desde diferentes perspectivas. Pásate por las redes sociales porque allí comparto cosas que no puedo subir al blog. No te cortes si quieres compartir tu opinión en los comentarios, si quieres hacer alguna sugerencia o petición escríbeme al e-mail: belen.yocuento@gmail.com 

Gracias por haber leído y acompañado hasta aquí. Nos vemos en la página siguiente.


NOTA: *No me gusta dar edades recomendadas pero a veces no hay más remedio. Ten en cuenta que es una orientación. **En la imagen de cabecera se ve un detalle del cuadro: El sueño del caballero o La vida es sueño, del pintor barroco Antonio de Pereda expuesto en Academia de S. Fernando, Madrid.

Comment (1)

  1. Ser como Gloria, ser todo Gloria. – YoCuento

    noviembre 27, 2023 at 9:32 am

    […] un artículo a conVersar frente a alguno de sus infinitos poemas, como ya lo hicimos con Calderón de la Barca, y si te apetece leer los poemillas que escribo (aunque solo sea para comprobar lo mucho que intento […]

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