¿Ves gatos o ballenas? A veces el cielo es un lienzo en blanco para la imaginación. Puede ser el escenario de juegos, historias, o incluso de nuestros miedos que toman forma. En esta lectura tan divertida, una simple nube cambia de figura y transforma una[…]
Sí, lo sé, llego a finales de enero con esta lista, pero ¿qué te voy a contar? Entre lo que cuesta arrancar el año y las mil historias que se van acumulando, aquí estoy llegando por los pelos. De todas formas, tengo la sensación de que este mes tan lluvioso no va a acabar nunca, ¡parece eterno!, así que se agradece acabarlo de la mejor manera. ¿Qué mejor que con libros?
¿Hasta dónde llega nuestra obsesión por el orden? ¿Y qué ocurre cuando soltamos el control y dejamos que la naturaleza se exprese en su estado más puro? Si tú también deseas, como parte de esa naturaleza, liberarte de ataduras, recortes, barreras, límites y demás jardinería que auto imponemos a nuestra personalidad para ser simétricos y perfectos, este álbum ilustrado es para ti.
Creías que se me iba a olvidar, ¿verdad? Pues nada de eso. La segunda tanda de cuentos y álbumes infantiles para diciembre está lista y viene con ganas. Si la semana pasada te traje doce lecturas para calentar motores, hoy llega el complemento perfecto para que esta Navidad no falte ni una buena historia.
Este diciembre no te olvides de la lectura. No hay mejor regalo que una pequeña biblioteca personal que crezca con nosotros, que nos haga sentir, soñar y recordar que la literatura es, también, un refugio. Haz de esta Navidad un momento de cuentos, de los que se leen bajo una manta y de los que se comparten alrededor del árbol.
La voluntad mueve montañas y cuando una persona se reta a sí misma desde la seguridad, sabiéndose acompañada pero también independiente, estamos ante una combinación todopoderosa. Es la alquimia de la vida, esta lectura es pura solidaridad y a la vez pura autosuficiencia. Cuando se unen ambos caminos en un mismo álbum ilustrado, el resultado no puede ser más bonito e interesante.
¡Venga, que a noviembre aún le quedan un par de semanitas y aquí vengo, con una selección de cuentos para leer bien y mejor, durante todo lo que queda de mes! Confieso, llego un poco tarde, pero te traigo 12 lecturas que si no las[…]
No te lo pregunto porque seguro que la respuesta es afirmativa. Todos hemos usado extraños y diversos papelitos como improvisados marcapáginas. Y es que, en lugar de buscar un marcapáginas formal, nos valemos de cualquier cosa, como si esos papeles, tan variopintos, quisieran quedarse entre las páginas del libro formando parte de nuestra propia historia, como recuerdos atrapados. ¿Tú también tienes esta misma sensación?
Qué maravilla contar con una autora así entre las filas de la LIJ. Jill Barklem, escritora e ilustradora británica, dejó una huella imborrable en la literatura infantil con su delicada serie Brambly Hedge (traducida como El Seto de las Zarzas). Se trata de una serie de aventuras estacionales: Otoño, Invierno, Primavera y Verano. ¿Cómo no? Hoy leeremos el cuento dedicado al otoño, ¿Te apetece leerlo? Voy a poner un té y seguimos porque esta lectura se lee mejor así.
¿Alguna vez has utilizado algún objeto para una finalidad que no es la suya? En la infancia, esto ocurre con frecuencia. Los niños transforman lo cotidiano en algo nuevo a través de su curiosidad. Los objetos cambian de función en sus manos, no por error, sino como parte de su forma de explorar el mundo. En esta historia, seguimos a un oso coleccionista, quee arrastra su barca de madera llena de objetos cotidianos que guarda como pequeños tesoros. ¿Te sumas a la lectura?